Foto de Ángel en Paracuellos.
Pongo esta crónica, pero animaos también vosotros:
"Lo que tienen los nervios (o el comer ayer una buena fabadica, y luego por la tarde guarrear a base de patatas chips, panetone, pastas y chucherías), pero esta mañana he sufrido, nada más levantarme, 5 ataques en poco más de una hora (desde las 7.00 hasta las 8.10). Daba igual, porque hoy tenía que correr; a unas malas, te echas a un lado, y si te ve alguien, da igual porque no conoces a nadie en Paracuellos .
Sin más inconvenientes hasta llegar a Paracuellos, nos cambiamos con tiempo, pero a la hora de entregar la ropa, una cola del copón en el ropero. Las 9.45, quedan 15 minutos, y todavía estamos con las bolsas en la mano. Llega un organizador-samaritano y nos dice que subamos arriba, que ese ropero también está habilitado. Misión concluida, nos vamos a calentar con solo 10 minutos por delante.
Una vez en la calle, frío de narices, pero el sol no está tapado por las nubes y no corre ni una gotica de aire; aquí hemos corrido en condiciones peores de frío y lluvia. Hala, 5 minutos de calentamiento, y a colocarse. Mi brother y José el Galgo se van para delante, pero yo, tímido, me pongo más bien en la parte del medio tirando hacia atrás con José Carlos y Raul. Entorviscao se queda detrás.
Pum, dan la salida, y hala, a esquivar corredores para ganar posiciones. Como no es la parte dura, avanzo sin problemas, y al llegar al km 2, cuando estamos bajando una cuesta larga, veo a Josu, la Gacela de Las Rosas. Dudo si quedarme con él, porque lleva un ritmo sostenido, pero me dice que él está muy mayor (ja, si luego solo ha entrado en meta unos pocos segundos después de mí).
Termina esta bajada, y primera subida fuerte. La tolero bien, y enlazamos una parte llana. Voy sobre los 4'30" por km, así que veo que no voy a conseguir bajar de 45' y que me voy a enterar en la segunda parte de la carrera, que tiene las cuestas fuertes. Pierdo fuelle, las piernas me van pesando y me agobia la camiseta térmica de manga larga que llevo. La saco por fuera del pantalón y trato de mantener el ritmo hasta llegar al km 5 (en 22'17", 53" más lento que hace 21 días en la Carrera del BBVA). "Te vas a enterar en el segundo parcial, no recuperas el tiempo perdido ni de coña".
Cuando casi estamos llegando al km 6 empiezan las cuestas buenas. La primera, de más de un km, no es muy pronunciada, pero parece no tener fin, como la crisis. Llevo la botella de agua en la mano, pero apenas la he probado porque, disimuladamente, no hago nada más que tirarme "eructitos" y no la asimilo bien. "Menuda ostia que te vas a meter hoy, las cuestas son tu tumba esta temporada". Me cabreo, estrujo la botella, sin muchos problemas, y empiezo a respirar fuerte. "Quedan poco más de 3 km, pero no te vas a rendir".
Termino esta cuesta sin que me adelante nadie, pero nada más coronar, giro a la izquierda, y otra cuesta. "La madre que me parió". Sigo bufando. Corono, y nuevo giro a la izquierda. Recupero y las piernas no me pesan tanto. "Sigue, Metralleta Chus". Sé que las peores cuestas han quedado atrás, pero todavía quedan dos jodidillas. Las afronto con determinación y no cedo. Km 9 y estamos al lado del polideportivo. Lo bordeamos, y giramos de nuevo, y hay una pequeña subida que se me atraganta un poco. Voy mirando el crono y sé que bajo de los 23'; no habrá debacle en este segundo cinco mil.
Entramos en la pista polideportiva, en loor de multitudes (aquí me he sobrao ) y aprieto -pero no de esto - para conseguir terminar este 5.000 en 22'38". Tomaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, he bajado de 45' (me he enamorado del minuto 44 en los diezmiles) y he podido con las cuestas!!!!
Ahora ya solo me queda Aranjuez, dentro de 21 días, para lograr el objetivo. Lucharé con todas mis ganas para conseguirlo.
Nada más terminar, reunión con los amigos y el brother (ha bajado de 42' y eso que ha tenido que pararse a estirar porque un gemelo se le había cargado bastante). Después, para Coslada, a tomar una cervezuquis, que la mañana del domingo ha estado bien aprovechada".
